Si nunca habéis ido os recomendamos que lo hagáis, es toda una experiencia y los pequeños de la casa disfrutan muchísimo. Ver una película mientras sientes el fresquito natural de la noche, sin tener que estar sometido al terrible aire acondicionado de las salas tradicionales... merece la pena!
En Madrid hay varios cines de verano: en el Parque Calero, en el patio del Centro Cultural Duque, en el patio del Palacio de Cibeles... en internet podéis encontrar todas las opciones y las distintas películas programadas.
Pero quizás el cine de verano más emblemático de Madrid sea el del Parque de la Bombilla. Allí cada verano se puede disfrutar del Fescinal, mucho más que simple cine. Muchísimas películas, para adultos, infantiles, en versión original... También encuentros con directores y actores... todo ello en un entorno tan apetecible como el del parque, no se puede pedir más.
Así que ya sabéis, si una tarde os apetece un plan diferente... ¡al cine de verano!
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